domingo, 13 de enero de 2013

Hacienda transfirió a la Junta otros 500 millones antes del final de 2012 .

El Gobierno central intenta que las autonomías con más problemas cierren el ejercicio con el déficit del 1,5% Ninguna de las dos administraciones han hecho público el acuerdo del FLA.


El Ministerio de Hacienda ha aumentado, al final, el dinero que la Junta de Andalucía recibió en el año 2012 con cargo al llamado Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), una suerte de rescate en forma de préstamos con el que las autonomías están logrando resolver el gran problema de sus pagos de facturas a los proveedores y, además, acudir al vencimiento de las deudas con los bancos. Hasta ahora, la Junta había recibido 2.133 millones de euros de los 4.096 millones solicitados, lo que provocó no pocas quejas por parte del Gobierno andaluz hacia el Ministerio que dirige Cristóbal Montoro, toda vez que otras comunidades, como Cataluña, habían obtenido casi el 100% de lo reclamado. De hecho, Hacienda cerró la entrega del FLA en diciembre sin gastar todo lo previsto, lo que aumentó el tono de las protestas.

Sin embargo, según ha sabido este medio, al final hubo pedrea. El Ministerio de Hacienda realizó una emisión extraordinaria de 3.000 millones de euros para aumentar el FLA, de los cuales unos 500 millones de euros le han correspondido a Andalucía, e irán destinados básicamente a seguir ganando liquidez y, en especial, a intentar cerrar 2012 con el objetivo de déficit del 1,5%. Esto se consiguió gracias a un acuerdo entre la Junta y el Ministerio de Hacienda que no ha trascendido por voluntad de ambas administraciones. Varias fuentes del Gobierno andaluz sí confirmaron que hubo un aumento del fondo, pero no quisieron precisar la cuantía de lo recibido, mientras que en Hacienda se abstuvieron de dar cualquier información. Este medio, sin embargo, ha sabido que oscila entre los 500 y los 600 millones de euros, con lo que la Junta habría recibido a lo largo de 2012 un total de 2.633 millones de euros, muy lejos aún de los 4.906 millones solicitados si bien esta cifra iba un tanto inflada. No obstante, las diferencias con Cataluña son evidentes, puesto que esta comunidad, una de las que se encuentra en peor situación financiera, ha recibido casi el 100% de sus peticiones. El porcentaje fue del 98,8%, pero eso fue antes de la pedrea final del FLA.

Y es que este reparto final no sólo ha ido a Andalucía, sino a aquellas comunidades acogidas al FLA y con problemas para cerrar el año con un déficit del 1,5%. El acuerdo final entre el Ministerio de Hacienda y las comunidades entraña cierto misterio por cuanto ninguno de los actores lo ha revelado. Sólo en el caso de la Comunidad Valenciana, su Ejecutivo informó que habían llegado otros 400 millones de euros más, aunque el objetivo final de su presidente eran 900 millones.

Con esta cantidad recibida, la Junta comenzó a resolver los graves problemas de liquidez que había acumulado en el último semestre del año 2012: pagó los vencimientos de deudas y, en especial, a los proveedores con mayores problemas, caso de los de la sanidad y la educación. Sin embargo, la Consejería de Hacienda, que dirige Carmen Martínez Aguayo, nunca ha negado que el problema de liquidez seguirá existiendo, bien hasta que el Gobierno central no envíe más dinero o hasta que los mercados financieros se abran a las comunidades autónomas. El FLA ha sido un by pass financiero que la Administración central le ha colocado a las autonomías: el Estado consigue financiación y cobra un interés a las comunidades, que tienen menos credibilidad entre los prestadores de deuda pública.

El objetivo del Gobierno central es que las comunidades autónomas no se desvíen del 1,5% del déficit en sus cuentas de 2012, aunque Hacienda advirtió hace unas semanas que ocho de ellas, entre las que está Andalucía, estaban teniendo problemas para satisfacer sus planes de ajuste, al menos hasta el tercer trimestre. La cifra final no se sabrá hasta el mes de febrero. El problema del ajuste andaluz es que los ingresos extraordinarios previstos sólo llegaban al 48% del total, y los recortes, al 33%. No obstante, falta el cuarto trimestre, que suele ser bastante corrector en cuanto a estas cifras. Tanto el presidente andaluz, José Antonio Griñán, como su consejera Martínez Aguayo han declarado que el déficit andaluz estará en la media del resto de las comunidades autónomas, aunque ello no conlleva su cumplimiento, aunque sí podría desviarse en sólo unas décimas.

El mayor problema, sin embargo, se situará en el año 2013, porque las comunidades deberán hacer un esfuerzo mayor que la administración central para acercarse al 0,7% exigido. Es un recorte similar sobre lo que se ha debido cumplir en 2012. La administración central, sin embargo, no tendrá que realizar un trabajo tan costoso, lo que ha motivado que Andalucía y Cataluña soliciten una elevación del techo de déficit para 2013.

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